Yoshihide Suga es el nuevo Primer Ministro de Japón, y la formación de su gobierno ha sido polémico por el hecho de incluir solamente a dos mujeres de un total de 25 miembros. Supone una proporción de tan solo el 10%, cuando la mitad de la población nipona está formada por personas del género femenino. Además, un 40% de los militantes del Partido Liberal Demócrata son mujeres.
Esto ha sido descrito dentro del seno del propio partido al que pertenece el dirigente Suga como «una democracia sin mujeres». Son declaraciones de Tomomi Inada, antigua ministra de defensa del Partido Liberal Democrático. Esto viene tras las recomendaciones de crear un gabinete más igualitario, pero todo indica que no fueron tomadas en cuenta.
Inada defiende que Japón debería dirigir su mirada a otros países que ya han tomado nota de este tipo de políticas. Se refiere a Francia o Alemania, lugares en que las mujeres poseen una mejor representación en asuntos políticos. Se estima que de forma internacional la representación política de la mujer ronda el 25%, mientras que en Japón está en torno al 10%.
Por si fuera poco, Japón se encuentra en el puesto 121 de 153 países en lo que a paridad de género se refiere (según el informe del Foro Económico Mundial).