El coronavirus ha tenido un impacto fuerte en Japón, ya no sólo en la vida en general (como en otros países), sino por el aplazamiento de los Juegos Olímpicos. Por supuesto, el turismo se resentirá, y en particular uno de los destinos más aclamados, tanto por extranjeros como por los propios japoneses: el Monte Fuji.
Este verano, por primera vez desde 1960, el Monte Fuji no abrirá su tradicional ruta de escalada. Habitualmente muchas personas suben a la montaña entre el 10 de julio y el 10 de septiembre (temporada oficial de escalada). No obstante, las autoridades estiman que existe riesgo de contagio.
Como curiosidad, si queréis conocer que destinos turísticos están cerrados en Japón, podéis consultar la siguiente lista.